miércoles, 15 de septiembre de 2010

PIEL SENSIBLE

Piel sensible


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La piel sensible es aquélla que tiende a reaccionar de formaexagerada ante factores externos (viento frío, calor extremo, sequedad ambiental producida por las calefacciones y el aire acondicionado, contacto con sustancias irritantes, productos químicos o de limpieza, detergentes, cosméticosinadecuados, abuso de exfoliantes, etc.) e internos (envejecimiento, cambios hormonales, alimentación deficiente, entre otros).
Usualmente la piel sensible es muy fina y frágil al tacto y muestra frecuente irritación, sensación de quemazón, ardor congestión, picor, eccema o descamación; esto último debido a que pierde más agua transepidérmica (agua corporal) que otros tipos de piel.




En ocasiones, también, puede presentar rosácea (pómulos, mejillas y aletas de nariz enrojecidos por lesiones vasculares) debido a la mayor reactividad de los vasos sanguíneos y a la transparencia de la fina piel. Además, las arrugas pueden aparecer de forma prematura.

Aunque la piel sensible es más frecuente en la región facial también se da en el área del escote y otras localizaciones como extremidades o cuero cabelludo.

Es importante observar que la piel sensible puede aparecer a cualquier edad. Sin embargo, muchas personas pueden notar su presencia después de un tratamiento para el acné severo.




Remedios populares

Remedio para piel sensible #1: Hervir dos cucharadas de hojas de salvia en una taza de agua por 5 minutos. Empapar una bolita de algodón y desmaquillar el rostro.

Remedio para piel sensible #2: Usar agua termal para lavar o limpiar la piel, ya que sus propiedades ofrecen un resultado excelente debido a su intensa acción calmante, antiirritante y dermoprotectora.

Remedio para piel sensible #3: Verter un poco de yogurt natural sobre las manos húmedas y extender sobre el cutis, el escote y el cuello. Dejar puesta por 10 minutos y retirar con una esponjita humedecida en agua tibia (ni fría ni caliente).

Remedio para piel sensible #4: Pelar y picar 2 bananos y colocarlos en una licuadora. Añadir 3 cucharadas de miel y 1/4 de taza de leche fría. Licuar y aplicar sobre el rostro y cuello. Dejar puesto por 10 minutos. Pasado ese tiempo, aclarar con agua fresca y retirar, utilizando una toallita desechable, el resto de la mascarilla con palmadita suaves.

Remedio para piel sensible #5: Disolver al baño María5 g de cera de abeja,4 g de manteca de cacao y10 g de lanolina hasta que la mezcla adquiera una textura vidriosa Agregar 20 g de aceite de áloe vera,15 g de aceite de corazoncillo y seguir calentando un poco al baño María. Calentar15 g de agua de rosas,10 g de extracto de genciana y 15 g de hinojo en un cazo aparte y luego añadir este último a la primera preparación sin dejar de batir. Retira del fuego y dejar refrescar. Aplicar sobre el rostro como una mascarilla regeneradora e hidratante durante unos 20 minutos. Con este remedio se logra humectar la piel sensible.




Recomendaciones

Debido a que la piel sensible requiere de mucha atención, les recomendamos tomar en cuenta las siguientes medidas para que esta piel luzca de la mejor manera posible.

Reducir o eliminar el consumo de bebidas alcohólicas, así como el de alimentos picantes o que contengan especias.

Evitar los cambios bruscos de temperatura (entrar en los baños de vapor o saunas, etc.), ya que esta dermis puede reaccionar de forma indeseada a los cambios buscos de temperatura (vasos capilares rotos por el cambio de temperatura que puede causar enrojecimiento en las mejillas).

Proteger la piel del sol.

Evitar la exfoliación con productos que contengan ácidos frutales, ya que puede resultar contraproducentes y derivar en irritación e incluso cuperosis.

Tener cuidado con los tratamientos cosméticos antiedad, ya que pueden inflamar y dañar los cutis sensibles en exceso.

Limpiar la piel con jabones muy suaves sin detergentes, ya que los fuertes eliminan el manto lipídico de la piel y la dejan descamada.

Preferir cosméticos con fórmulas hipolergénicas, con pocos ingredientes químicos, sin conservantes, perfumes ni alcohol.

Tratar la piel con suavidad, sin frotarla ni arañarla.

Tener una dieta variada que incluya todos los nutrientes especialmente los ácidos grasos esenciales, vitaminas y antioxidantes (fresas, brócoli), así como la ingesta adecuada de agua ayuda a mejorar el estado de la piel.